Ubicado en el corazón de la ciudad y con unas vistas privilegiadas, el departamento Dos22 posee una línea basada en la personalidad de su propietario. Diseñado para un amante del arte, la intervención buscó crear espacios que reflejaran la personalidad sobria y elegante del usuario. 

El departamento se diseñó para que cada pieza de arte fuera la protagonista de su propia historia. En la sala, el librero es el elemento protagónico, donde cada nicho y pieza de arte fueron pensados estratégicamente para narrar la línea del tiempo de la colección.

Otro de los elementos principales es la chimenea, la cual se ubica al centro del departamento, esta chimenea se diseñó como un bloque de mármol suspendido que divide de manera sutil los espacios, pero a su vez permitiendo tener relación de un lado con el otro. Así mismo, se integró una cava con iluminación indirecta para que el usuario pueda exhibir su colección de vinos. 

El uso de materiales y gama cromática fue pensado para crear un ambiente elegante, pero a su vez divertido. Las tonalidades verdes de los textiles contrastan con la sobriedad de los tonos negros y oscuros de las maderas y algunos muros, así como los elementos de latón que se dejan ver por todo el departamento y resaltan de forma puntual las piezas de diseño.